Especial del día

Como se acerca el fin de semana vamos a celebrarlo con un vídeo, cortesía de Bernardo Pérez, del IEO en Santander. Bernardo participó en Platuxa en 2014 y ojalá lo vuelva a hacer, por muchas razones. Una de ellas es que hizo unos vídeos muy interesantes, uno de los cuales es el protagonista de hoy. Ya veréis que le echó trabajo.
 

Para los que no estáis familiarizados vamos a describir lo que se va viendo, que es una maniobra de largada del aparejo (echarlo al agua, vaya), vista desde varios ángulos. Bernardo filmó varios lances para hacer este vídeo y luego seleccionó tomas, así que hay operaciones que se ven dos veces.
 

El vídeo empieza con el aparejo en cubierta, se ven muy bien el tren en la relinga inferior, que son esas bobinas circulares negras, y la línea de flotadores blancos y amarillos, en la relinga superior. El tren hace que el aparejo se deslice mejor por el fondo porque va rodando, eleva la red y la protege de roturas. En inglés tiene un nombre muy descriptivo, rockhopper, literalmente “saltapiedras”. Los flotadores tiran de la boca de la red hacia arriba y la mantienen abierta.
 

En seguida se ve a los marineros ir a sus puestos. Baja la guillotina, esa compuerta móvil a popa, y con ayuda del pórtico en popa se larga la red (se echa al agua). El contramaestre se coloca en medio de la cubierta para asegurarse de que la boca de la red baje bien, y que los laterales (alas), estibadas en el tambor de red, no vayan liados.
 

Cuando la red está entera en el agua, sube la guillotina y el contramaestre coloca con ayuda de los marineros dos guías verticales para que las malletas se mantengan separadas.

 

A continuación sueltan las malletas de las cañas (cabos que unen la red al tambor) y las sujetan a los pies de gallo (que son los que mantienen las puertas derechas en el fondo). Ahora, cada puerta tiene dos puntos de unión a la red.
 

Se empieza a largar cable (en función de la profundidad), las puertas van cayendo al fondo y arrastrando la red con ellas, hasta llegar al fondo. Cuando el cable se tensa, por efecto de la hidrodinámica, las puertas se van separando (abriendo decimos nosotros) y a la vez cerrando la boca del aparejo. Según a qué profundidad pequemos, la red abre más en la horizontal y menos en la vertical, o al contrario. Cuando la apertura horizontal (o separación entre puertas) es correcta, y la red está asentada en el fondo decimos que hemos hecho firme, y empiezan a contar los 30 minutos de nuestros lances.