Aguas turbulentas

¡Otra semana en el bote! Ya va quedando menos pero nosotros seguimos muy centrados en el día a día. Ayer terminamos el día con 6 lances que dieron mucho de sí. Aquí siempre hablamos de las especies objetivo, pero en total se recogieron 112 especies sólo de peces, más aparte los invertebrados. Y el rango de captura por especie fue de 1g a 1t. El rango de nubes fue menos variable, de niebla espesa a totalmente cubierto. Pero al menos cuando despejó la niebla y el sol bajó lo suficiente para asomarse por debajo de las nubes quedó una puesta de sol muy bonita que fotografió Jose Luis.

Atardecer en el Gran Banco por Jose Luis del Río

El equipo de Teo a todo gas: Jose Luis V, Jose, José y David al fondo, Fergus, Vanessa C y Rubén.

Hoy hay bastante más mar que ayer, menos mal que en el puente se las saben todas y vamos trabajando con normalidad. Mañana es posible que el tiempo empeore pero confiamos en poder trabajar. De momento hemos estado entre los 40 y los 60 m, y los lances han sido bastante desiguales en lo que se refiere a cantidad, pero siempre dominados por la limanda. Ahora vamos buscando más fondo. Mientras tanto Nair no para, entre los CTDs y grabar los datos puntualmente. Los lances de CTD se llevan su rato, porque no se trata solo de echarlos por la borda. Nair tiene que arrancarlo antes de cada lance, grabar número de lance y coordenadas, descargar los datos cuando la sonda vuelve a bordo (para lo cual hay que secar bien las conexiones), comprobar que el lance ha ido bien, y por las noches hay que limpiar los tubos por los que circula el agua. No me extrañaría que le estuviera poniendo incluso una manta antes de irse a dormir.  Pero el caso es que está funcionando mejor que nunca.

Nair no pierde ni un minuto.

 En el lance de profundidad de ayer salieron estos ciclópteros diminutos, de apenas 5 cm de longitud. Se llaman Eumicropterus spinosus y son bastante comunes en el Atlántico Norte, pero he visto en un artículo de Casey y Myers (1998) que se capturan mejor de noche. He abierto uno de ellos y ha resultado ser una hembra en puesta, y los huevos, de color naranja, medían 2-3  milímetros de radio. Como otros ciclópteros tienen las aletas pélvicas modificadas como un disco con el que se adhieren al fondo. Estos peces son pasivos hasta el punto de dejarse coger por buceadores, así que los noruegos Berge y Nahrgang (2013) se llevaron una sorpresa cuando encontraron en sus estómagos unos anfípodos que se llaman Themisto libellula, que  sí se mueven rápido y además no viven en el lecho marino, si no que son pelágicos. Tanto les llamó la atención que hicieron otro muestreo para comprobar si el descubrimiento había sido una casualidad, pero no, esos anfípodos parecen ser el plato favorito de los ciclópteros espinosos. Se sabe que el zooplancton (del que forman parte los anfípodos) hace migraciones verticales diarias, y van a la superficie de noche para alimentarse y durante el día se esconden en capas más profundas. Lo que Berge y Nahrgang proponen es que quizás muchos de estos animales llegan al mismo lecho marino, en lugar de simplemente descender a capas donde la luz escasea. En otras palabras, estos ciclópteros piden la comida a domicilio.

"Este no se calla ni fuera del agua..."                   "Blablablablablablablabla......"                           "Me duermo, me duermo"